Cerró los ojos y se inclinó sobre ella para besarla por última vez, se acercó sigiloso hacia sus labios, recorriendo centímetro a centímetro el sendero de una piel que conocía tan bien como la suya propia...la pequeña cicatriz junto a la barbilla y el diminuto surco que formaba en su ascenso hacia la boca, el eterno aliento a esos chicles de fresa que siempre masticaba y que la transformaban en una fruta más que deseable. Continuó aspirando su aroma, el olor de su piel, al tiempo en que su lengua se aproximó a ella suplicándole toda la piedad que ésta fuera capaz de darle... pero ella ni se inmutó, se desvaneció entre sus dedos como cada día, lo torturó una vez más hasta estrangularle la memoria y allí completamente sólo, acurrucado en el centro de su habitación, se inclinó sobre ella para besarla por última vez y lloró la pena muda, de no haberla besado nunca.
13 comentarios:
Querida amiga, como no ser agradecido ante tanto sentimiento volcado en letras.
Impecable micro, mi Señora de las Letras.
Un beso.
¿Estaba soñando? Si es así, si recordaba a un amor que ya no está presente me da bastante pena.
Porque de haber estado allí (ella), podría haber descendido el marfil de su cuello previo paso por el lóbulo de su oreja; podría haber escalado sus pechos con la lengua, con delicadeza, en espirales de ensueño...y podría haber cruzado la piel de su vientre, como un marinero que busca puerto, guiado por el aroma de su amor. Podría haber sentido bajo sus labios el ligero temblor de su amada, fundiéndose entre sus dedos y bajo sus labios.
Pero soñaba, o eso he entendido. Amar un recuerdo ha de ser terrible. Pidamos a los dioses que nunca nos suceda una cosa semejante.
Muy bueno, me ha parecido sobrecogedor.
Un beso, Arwen
Disculpa el comment anterior. Esra exactamente el mismo pero sin una palabra repetida que le quitaba el sentido, grrrrrrrrr (estoy medio dormido, sorry)
Lo primero que he pensado al concluir la lectura del microrrelato es que el hombre llora la desdicha de no haberla besado nunca y que ya no podrá hacerlo nunca más porque está muerta. Quizá sólo le un único beso que darle a modo de despedida.
Un poco triste, sí.
Bss.
TR, impecable tú siempre con tus halagos a mis letras. Un gran beso y gracias.
Valaf, desconozco si soñaba o si vivía soñando, o si deseaba lo que no pudo ser o tal vez no se atrevió a constatar...que duro debe ser... y tal vez si ella hubiera estado...tal vez...aunque eso nunca lo sabremos... ;)
Besos y gracias por tus palabras y por pasar y reflexionar entre mis Caladas literarias.
Arwen
Mar, se puede interpretar de muchas maneras, pero personalmente no creo que ella esté muerta, no al menos físicamente...
Besos que si te doy. :)
Arwen
Pues lo había entendido mal, disculpa.
Bueno, de todas formas y sea como sea, es un gran relato. No he vivido esa tortura en mis carnes así que tampoco puedo imaginar exactamente la situación anímica del prota.
De nada, mujer. Es un placer leer tus relatos.
No te preocupes Valaf, todos los textos tienen siempre un sin fin de interpretaciones, tantas matices como seamos capaces de comprender y/o de transmitir...ahí está la riqueza y el poder de la comunicación.
Y sí, una tortura en toda regla. ;)
Besos y nos leemos.
Arwen
Buuaaaa! me han dado hasta ganitas de besarla a mi tambien!... porque? nunca la ha conseguido? solo se la ha imaginado? un sueño? ella se ha ido?...
En fin, que ojalá hubiese podido besarla, al menos una vez...
Besicos nena.
Mar.
Saludos Mar y sea como sea el caso es que jamás la ha besado...
Un beso de verdad para ti!! ;)
Arwen
La vida es el intervalo que transcurre entre un despertar y otro, así que realmente ¿importa si la besó y la perdió o tan solo la soño?
Me encantó.
Importa que sintió y lo hizo muy intensamente... ;)
Gracias Pilar por disfrutarlo y por acercarte un día más.
Besos.
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