Con los pequeños ojos mirándola fijamente desafiaba todas las leyes naturales, haciendo girar continuamente la cabeza de su progenitora, que parecía haber perdido el rumbo de sus pensamientos, nadando a la deriva en el naufragio de su propia conciencia, a la que alimentaba de mentiras, de pretextos con los que acallarse continuamente y devolver todo el sentido a sus quejas...aquella diminuta niña era la causante de todos sus problemas, ¿porqué le había tocado a ella?, se preguntaba una y otra vez...mientras una diminuta cabellera oscura se dejaba escurrir entre sus manos, manipulando una nueva acción, que la madre acatará sin reservas.
DÍAS INVISIBLES
Hace 3 horas
16 comentarios:
Es muy duro, muy bello, muy real. Cuántos padres hay que son simples marionetas de sus hijos. Es increible. Y el problema es que para enseñar a una generación respeto hacia los demás, hacia las personas mayores, etc se tiene que empezar por respetar a los padres. Y doy fe que hay muchos casos en los que no es así.
Las cuerdas atan tanto al títere como al titiritero.
Un beso
Muy buen microrrelato para la reflexión.
Cuantas veces son los padres las marionetas de sus hijos, y lo que es peor: no se dan ni cuenta!
Muy bien recogida la tiranía a la que muchos insolentes niños, adolescentes... hijos somenten a sus padres. ¿Que porqué tocan hijos así? Puede ser que toquen hijos así, pero los padres son los que tienen mucho que decir y hacer en cuanto a conductas de ese tipo.
Muy bueno Arwen, como siempre :)
Bss.
Nuria, un caso muy real, ya lo creo...como el de muchos progenitores que perciben que "algo va mal" pero no aciertan a descubrir los hilos de la manipulación. Estoy deacuerdo contigo, hay que guiar el barco, tomar el timón y marcar el rumbo, sólo de ese modo los grumetes sabran navegar sin zozobrar...besos y un placer leerte de nuevo.
Arwen
Pilar, las cuerdas atan títere y titiritero, el problema viene dado cuando el titiritero no alcanza todavía la medida suficiente como para tener que ponerse de puntillas...
Besos y me alegra leerte :)
Pulgacroft, ese es el verdadero problema...no darse cuenta... hay que saber mirar por encima de las emociones para evitar que un ejército de titiriteros gobiernen los hilos...
Mar, gracias por tu reflexión. Personalmente yo opino "que no tocan hijos así", que son los padres los que "sin darse cuenta" promueven y propician la conducta de estos infantes manipuladores...el peligro es que a mayor psique...mayor manipulación, mayor control y mayores problemas... o muchos adultos en nuestra socieda actual están ciegos ante tales conductas o algo tan claro sólo lo ven los ojos de los demás.
Besos sin hilos :)
Yo tengo dos, uno de trece y otro de quince, dos chicos. Lo cierto es que es muy complicado, es así. cientos de libritos y teorías y nada: todo pasa por lidiar con tu responsabilidad día a día y, por cierto, aceptar que un padre es un padre y no un colegui. Son dos cosas muy distintas. Y eso me lleva al tema ese del "dejar hacer", tan de moda entre ciertos sectores. No, no hay que dejar hacer ni tener complejos a la hora de educar según tus criterios como padre/madre. Es que, de lo contrario, acaban recibiendo esa "educación" de otras fuentes porque, como es obvio, el chaval necesita información de todo tipo para ir creciendo como individuo.
Bueno, un post que toca temas sensibles.
Un beso
A pesar de los pesares esa niña era todo su corazón y su vida por mucha coraza que intentase ponerse.
Besos,Arwen
Valaf, yo también tengo uno de 8 años y es tarea ardua, como se comenta mil veces, los hijos no vienen con manual de instrucciones y nosotros aprendemos a ser padres a través de ellos y es por eso mismo que tenemos que tener muy claro lo que somos y nuestro importante papel educador, aplicando firmeza, seguridad, valores y amor a partes iguales...¿difícil?...sí, mucho, pero también un reto por el que vale la pena lidiar.
Un beso y me alegra leerte de nuevo.
Arwen
Saludos Felipe y sí desde luego que esa niña era su corazón y ese precisamente es el motivo por el que consegue manejar los hilos, un amor sin reservas...
Besos y gracias por pasar. :)
¿Por qué le había tocado a ella? Yo diría que porque fue un poco estúpida, o torpe si se prefiere. Perdón, no sé si el cuento en sí mismo era una pregunta retórica; pero los malos padres no me inspiran compasión alguna.
Saludos.
Bienvenido Javi y si esa torpeza le va a costar cara, como no se de cuenta de los hilos que la manejan.
Saludos.
Arwen
No es mi intención ser la aguafiestas y la que turbe este espacio, pero a determinadas edades los niños necesitan más atención que en otros momentos de su desarrollo y no por ello, serán unos chicos malcriados, caprichosos e inmaduros por la atención de los adultos en esos instantes concretos... creo.
Y en cuanto a tu texto: enharabuena, me ha gustado mucho la forma de tu escritura y el estilo tan elegante.
un saludo
Bienvenida Esilleviana, muchas gracias por tu comentario y por los elogios que me dejas. Por otra parte de ningún modo eres aguafiestas y sólo dejas constancia de tu modo de pensar. Y efectivamente los niños necesitan mucha atención, siempre y cuando sea sólo eso, atención. En el momento en el que esta atención se convierte en una desatención, precisamente por ser demasiado permisivos, no ser el adulto el que marque las normas y en definitiva pasar a ser el manipulado...pierde todo su sentido.
Saludos.
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